La industria petrolera venezolana, en los últimos 25 años, ha pasado de ser un punto de referencia mundial a no estar, hoy, en el radar del mercado del petróleo global. Esta situación obedece a una caída de la producción de petróleo a partir del año 2013, producto de malas praxis gerenciales y aplicación de políticas públicas no acorde con prácticas comunes a nivel internacional.
Ahora bien, la gobernabilidad en Venezuela ha sido cuestionada por un gran número de naciones y organismos, que dio lugar a presiones para un retorno a una gobernanza democrática. Esas presiones son las denominadas “sanciones”, que fueron habilitadas en principio por Estados Unidos en el 2017, y luego aplicadas por otros países, principalmente la Unión Europea.
La gráfica a continuación muestran las exportaciones venezolanas de petróleo para los años 2017 y 2021 para efecto de visualizar el impacto por las sanciones. (Grafico dinámico en https://public.flourish.studio/visualisation/12247401/)
En primer lugar existe una disminución en los volúmenes de exportación de 1152 kBD (miles de barriles diarios), asociado a la caída de producción de 1356 kBD entre los volúmenes de 2017 y 2021, de 1911 y 555 kBD, respectivamente. Es de aclarar que no toda esa caída de producción, está asociada a las sanciones per se. En un escenario de 15 % de declinación natural de producción, podemos estimar que la caída de producción por efecto de las sanciones es de unos 356 kBD.
En lo atinente a los destinos de esas exportaciones, se puede ver que las sanciones los han modificados. Así tenemos que para el 2017, Venezuela exportaba al Asia & Pacifico, incluyendo China e India, el 39.4 %, y el resto 60.6 % a países de la OECD y Latinoamérica
Para el año 2021, los destinos de exportación se redujeron a 445 kBD, al comparar con los volúmenes del 2017 que fueron de 1597 kBD. En lo atinente a los destinos, estos se concentraron en tres regiones: China, Latinoamérica y otros países de Asia. Esto implica que debido a las sanciones los países de la OECD dejaron de importar crudo desde Venezuela.
Por otro lado, Venezuela ha utilizado artificios para obviar las sanciones como son: Apagar los transponer de los barcos para no mostrar su ubicación, hacer trasegado de crudo y productos en alta mar o alejados de las costas para ocultar el destino final del crudo y producto, entre otros. Es de destacar, que el transporte de hidrocarburos desde Venezuela hacia el Asia & Pacifico para que sea económico debe realizarse en tanqueros tipo VLCC, ya que la economía de escala de estos barcos rebajan el flete en un 20 % al compararlos con un tanquero tipo AfraMax. En un VLCC el flete para esa región se sitúa entre 4.5 y 5.5 $/B.
Para el 2022, el panorama descrito anteriormente se ha complicado debido a la guerra Rusia – Ucrania, la cual ha modificado el mundo energético y en especial a los suministros de hidrocarburos. En este escenario, el crudo venezolano compite abiertamente con el crudo ruso en el Asia & Pacifico, originando descuentos impensables en los crudos venezolanos.
Como corolario se puede indicar que las sanciones no han logrado, aun, que Venezuela regrese a una gobernanza democrática, pero el gobierno se ha visto afectado económicamente y ha dado señales de querer cambiar su actual gobernanza…. El tiempo, lo dirá.