La comunidad LGTBIQ+ también es parte de la población que se ve afectada por la crisis actual de forma diferenciada. Esto no es un asunto que deba esperar, ya que debemos insistir en documentar, denunciar y difundir lo que viven las personas trans en un país con un Estado que no cumple en garantía de derechos para toda su población.
Sin duda, la crisis venezolana que persiste y se agudiza en poblaciones especialmente vulnerables presenta importantes retos y uno de ellos es justamente la falta de información oficial. Las carencias y necesidades específicas que viven este grupo de personas son totalmente invisibles cuando se trata de encontrar cifras o datos que puedan respaldar las denuncias acerca de cómo vive esta población, quienes ni siquiera cuentan con la identidad que corresponde al género con el que se identifican.
Para nadie es un secreto que los procesos de hormonización que necesitan las personas trans para poder vivir como quieren verse, y que abarca lo físico hasta lo psicoemocional no son posibles en Venezuela. Y es que, la gran mayoría, no tiene oportunidad de dar inicio al protocolo de transición mediante procedimientos hormonales. Esta forma de discriminación no solo les invisibiliza, sino que aumenta sus vulnerabilidades.
Ahora, bien y hablando de lo que significa también, vivir con el peligro inminente de muerte a causa de la desprotección, se debe mencionar que tampoco este grupo cuenta con el derecho a la salud. En este caso, son muchas las personas trans con VIH que han manifestado problemas para obtener sus tratamientos, además de la estigmatización a la que son víctimas en hospitales y laboratorios, este tipo de discriminación impide que puedan acceder a servicios de calidad, que salvaguarden su salud tanto física como mental.
Las personas trans, frente a la crisis del sistema de salud venezolano, no están contando con servicios públicos gratuitos y especializados, la gran mayoría carece de recursos económicos propios que les permitan tener un acompañamiento psicológico.
Discriminación y estigmas
Aunque en Venezuela se habla de la no discriminación, no hay nada que valga ante la violencia sobre sus cuerpos, y el desamparo por parte del Estado en brindarles políticas públicas reales que les impida ser víctimas de diversos flagelos. Las burlas y el rechazo desde el desconocimiento y la cultura patriarcal y machista son algunas de las cosas a las que se enfrentan a diario sin ninguna esperanza de resolver.
La Emergencia Humanitaria Compleja (EHC), que vive Venezuela, también tiene su impacto profundo y diferenciado, pues no hay garantía de sus derechos. Los riesgos y vulnerabilidades se incrementan debido a que estas personas no pueden acceder a empleos formales, por la falta de oportunidades, y estigmatización que en el país persisten. Situación que les obliga a ejercer trabajos mal remunerados y otros donde son sometidas a nuevas formas de explotación laboral, incluida la sexual.
Ataques y discurso de odio
El discurso homofóbico y transfóbico de algunos funcionarios y la ausencia de perspectiva de género en las leyes existentes, acentúan las violencias que viven también en las redes sociales por parte de cualquier persona que partiendo del ejercicio de su derecho a la libertad de expresión rompe los esquemas del respeto por la diversidad y la interseccionalidad.
Recientemente presenciamos los ataques contra Tamara Adrian solo por ser una mujer trans con aspiraciones políticas y con una trayectoria histórica en la lucha de su comunidad en el mundo, pero a la que también el Estado venezolano le niega su derecho a existir legalmente. Ella es abogada, profesora universitaria y activista por los derechos humanos y resultó electa diputada en las parlamentarias de 2015. Ahora sorprende postulándose para representar a la oposición en las elecciones presidenciales de 2024.
Las denuncias que no se han escuchado
En 2019 Caleidoscopio Humano documentó 4 casos de mujeres trans captadas por mafias de trata y esclavitud moderna. A través de las redes sociales se les ofrecía la oportunidad de tener alimentación asegurada, tanto para ellas como para sus familiares. Las víctimas eran llevadas a Europa como destino final. Estos casos no han sido publicados porque las víctimas no lo han autorizado. 3 de ellas lograron escapar.
La llegada de la pandemia también fue un reto que muchas de ellas no lograron superar, ya que no existen tampoco cifras de transfemicidios, crímenes de odio, hechos de discriminación o violencia por razones de género en el país. Ni siquiera sus nombres están en los medios de comunicación social que cubren estas violencias.
Muchas mujeres trans que decidieron migrar se encuentran desprotegidas e ignoradas y quienes aún permanecen en Venezuela son víctimas de profundas desigualdades que impiden tener acceso a sus derechos más básicos.
Las campañas comunicacionales también son inexistentes en el país, aunque periodistas, activistas y profesionales de la comunicación se han acercado por interés individual a Caleidoscopio Humano para hacer coberturas más humanas en este tema. Los derechos de este grupo de personas parecen no ser prioridad y todavía son muchos los medios de comunicación que revictimizan, estigmatizan y discriminan sin parar.
Agenda política y de derechos
Actualmente, cuatro organizaciones de derechos humanos unieron fuerzas el Día Internacional de la Visibilidad Transgénero para lanzar la campaña “Simplemente Quiero Vivir, Así Como Tú”, para exigir durante todo 2023 mayores protecciones legales, derechos y seguridad para estas personas en América Latina y El Caribe, alzar estas voces invisibles y tratar de hacer voltear la mirada a la realidad de este grupo de personas.
La salvadoreña Asociación Solidaria para Impulsar el Desarrollo Humano (ASPIDH), el Colectivo Unidad Color Rosa (CUCR) de Honduras, Estamos Contigo de Cuba y Caleidoscopio Humano de Venezuela se agrupan en este esfuerzo mediante la plataforma en línea donde compartirán información de estas realidades, comparando e intercambiando experiencias de países con políticas restrictivas en cuanto a estos derechos.
“Simplemente Quiero Vivir, Así Como Tú” es un espacio que a través de estas organizaciones y de la web www.inclusivetrans.org estará alzando las voces por los derechos de las personas trans que aún siguen silenciadas.
Finalmente, lo que representa para la ciudadanía el avance en materia de derechos para todas las personas debe ser monitoreado con lupa con la candidatura de una mujer trans a las primarias presidenciales en Venezuela.