El profesor William Anseume, coordinador de Vente Venezuela en Guaicaipuro, aseguró que para nadie es un secreto que parte sustancial del apoyo de los militares al régimen tiene que ver con la venia que tienen para actuar con ciertos negocios productivos. «Parte de la manera que tienen de comprarlos desde el poder» .
«El de la comida es uno importante. No les falta, por supuesto. Además, con los productos de las bolsas se generan irregularidades de todo tipo, pero además, se está creando una discriminación absurda, según la cual, hay que ser miliciano para medio comer mejor. Esto genera repulsión en la ciudadanía», dijo.
Continuos el dirigente político de Guaicaipuro: «En Paracotos y Guaicaipuro recibo los mensajes acerca de los contenidos de las bolsas para los milicianos, entendiendo que es casi su paga, ya que son de los militares que no cobran su trabajo, sino que se benefician indirectamente por las nimiedades que hacen al servicio de los demás componentes, especialmente la Guardia Nacional. Pues, me indican que a ellos las bolsas les trae hasta proteínas, que en las de las comunidades ya no llega ni por asomo: granos, atún, sardinas; hasta café y leche. El mensaje surge claro: si eres miliciano tienes doble bolsa, la misérrima, empobrecida, con la harina inmezclable y mucho arroz y la otra, que no pagas: bien resuelta. En las comunidades ya no llega proteína en las bolsas ni por asomo, lo que hace crecer peligrosamente la desnutrición de la población en plena pandemia, ademas».
«Lo que corresponde es, sin duda, volver al desarrollo productivo, al desarrollo del país laboral. Que los ciudadanos trabajen bien para comer bien lo que les provoque y no dependan de las dádivas de un régimen que, así procura arrodillarnos hasta para comer. Se necesitan más empresas productivas. Libertad laboral. Libertad individual. Se necesita la libertad para que la gente no dependa de militares ni de gobierno para hacer su vida. Pero para eso tenemos que salir de este tormentoso régimen, con la indispensable ayuda internacional que hay que procurar».
Redacción El Tequeño
