Deportistas y ecologistas de los Altos Mirandinos reiteraron este miércoles su rechazo a los movimientos de tierra «ilegales» que se vienen realizando en La Fragua.
«Un gran movimiento de tierra está ocurriendo en ese sector, removiendo no solo la capa vegetal, que no es solo ‘un montecito’ cómo dice Vicente Chávez, es el habitad de la poca fauna autóctona que nos queda en el área, hay muchas aves que hacen sus nidos en la tierra, perezas, culebras y otras especies están siendo afectadas», reseñó uno de los usuarios.
Agregó que no sólo es el impacto ambiental que se está llevando en la zona de forma descontrolada, «no es solo la falta de respeto al medio ambiente sino también a la comunidad deportiva en general que hace vida día a día en la zona, un lugar que sirve de esparcimiento para los habitantes de los Altos Mirandinos quienes utilizan este pulmón natural para distraerse de sus asuntos y conectarse con la naturaleza».
Indican que la situación se originó de manera sorpresiva con un gran movimiento de máquinas dirigidas por Vicente Chávez quien se identificó como el titular de la concesión, «manifestó que tenía todas sus autorizaciones otorgadas por las autoridades competentes, se le solicitó el proyecto aprobado y nunca fue mostrado» .
En días siguientes – agregó el denunciante- se han sostenido varias reuniones donde se pudo constatar, según lo manifestado por el consultor jurídico de la gobernación que no existía autorización alguna ni proyecto para intervenir el área, lo mismo se pudo verificar por la autoridad urbana del municipio Los Salias (dirección de Planificación Urbana) dónde no reposa ninguna autorización para esta intervención, existe incluso orden de paralización de estás actividades mientras esté ciudadano se pone a derecho, lo cual no ha hecho y día tras día sigue el impacto ambiental motivado a un súper evento de carros rústicos en el fangodromo.
-Su único alegato de forma muy fresca es que «el tiene un padrino político mágico, que él está bien conectado», eso mismo manifestó y le sirve para burlar a la ley, al ambiente y a la comunidad deportiva, que por supuesta está siendo afectada por intervenir la ruta de corredores y bicicletas.
«Es un espacio natural deportivo que beneficio a miles de personas de los Altos Mirandinos para hacer deportes, picnics, caminatas, yoga y otras disciplinas está siendo convertido en un lugar que sirva para eventos con bebidas alcohólicas, sólo beneficiando a unos pocos“, dijo.
Redacción El Tequeño