Ocurrió en el Hospital Universitario de Maracaibo. Un paciente de 59 años fue sometido a una intervención quirúrgica de rutina, pero cinco días después falleció por un shock séptico, luego que los médicos le dejaran una tijera en su estómago.
Familiares de Iván Chávez afirmaron que el pasado domingo 20 de marzo, el ciudadano fue llevado al pabellón sin inconvenientes.
Una vez en su habitación, los médicos comentaron que solo necesitaban que el señor evacuara para catalogar como satisfactoria la operación, sin embargo, los dolores abdominales empeoraban.
Tres días después, los doctores decidieron hacerle un examen de rayos X y descubrieron que habían dejado un instrumento quirúrgico dentro de su cuerpo.
Pese a ser un paciente renal, volvió al quirófano sin exámenes preoperatorios, pero en esta ocasión terminó con problemas respiratorios.
«Nos dijeron que no querían despertarlo porque no soportaría el cambio drástico de la operación» aseguró una de los familiares.
En la madrugada del viernes, los allegados recibieron la lamentable noticia del fallecimiento.
«Desde las 12 intentamos tener información del paciente y no fue hasta las 3:17 am cuando nos dijeron que justo a esa hora había fallecido, cuando la realidad es que ya tenía casi dos horas muerto».
Los familiares solicitaron a las autoridades investigar el caso.