Un vídeo difundido en las redes sociales y en televisión muestra a Macron, de 45 años, recibiendo una botella de Corona en el vestuario del Toulouse tras la final celebrada el sábado en el Stade de France de Saint-Denis.
Tras ser instado a bebérsela de un trago, el mandatario centrista vacía la botella en 17 segundos entre vítores y gritos del cuerpo técnico y los jugadores del Toulouse, que se impusieron 29-26 a la Rochelle.
Aunque Macron es un aficionado a los deportes y suele visitar los vestuarios de los equipos franceses, como durante la final del Mundial de fútbol de Catar cuando Argentina derrotó a Francia, esta imagen no dejó indiferente.
«La masculinidad tóxica en el liderazgo político en una imagen», criticó en Twitter la diputada ecologista Sandrine Rousseau.
El diputado oficialista Jean-René Cazeneuve defendió no obstante que se trata simplemente de un «presidente compartiendo la alegría de 23 jugadores y participando en sus tradiciones».
Emmanuel Macron busca relanzar su mandato y su imagen después que su impopular reforma de las pensiones hiciera caer su popularidad a cerca de su nivel más bajo.
Pero asociaciones y médicos especializados en la lucha contra las adicciones criticaron que el presidente se mostrara bebiendo una cerveza de un trago, cuando debería dar «ejemplo con un comportamiento saludable».
Según el ministerio de Salud en una nota de 2021, el consumo de alcohol está vinculado a la muerte de casi 49.000 personas al año.
AFP
