El dirigente de Voluntad Popular Manolo Blanco, calificó como «una medida retaliativa que merece el repudio de todo nuestro pueblo», la eliminación del CLAP por orden del alcalde, Farith Fraija, a las comunidades Potrerito I y El Samán por protestar exigiendo servicio de agua y gas.
«Manejar los recursos de la Nación como si se trata de su propia bodega, es criminal y delictivo, pues el CLAP se paga con recursos individuales y subsidio del Estado; pero además privar de los derechos a la alimentación y la protesta, habla de un ser humano perverso que considera a las demás personas como cosas a quienes puede dar o quitar cuando y como quiere. Un dictadorzuelo de bajísima calidad que goza violando Derechos Humanos», expresó.
Destacó que el pueblo carrizaleño ha tenido la nobleza de soportar meses sin agua, cuando es un derecho que debe garantizarse permanentemente, mucho más cuando se vive una situación de cuarentena por el Covid-19.
Por su parte, en audios que se filtraron de un grupo de los autodenominados «Jefes de Calle», puede oírse a dirigentes oficialistas en desacuerdo con esta medida que impacta a cientos de personas.
«Es una orden directa del alcalde, no podemos hacer nada», dice una vecina de Potrerito I identificada como Miriam Luna. En tanto que una mujer que manifiesta ser líder social de El Samán asegura «no estoy de acuerdo… tenemos meses pidiendo que resuelvan lo del agua y nada… se nos escapó de las manos».
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