El polémico punto de control ubicado en la calle Rivas de la capital mirandina, no sólo genera malestar entre los conductores sino que afecta directamente a más de un centenar de familias que habitantes en las residencias Savil.
Tras su instalación el jueves, el cierre de una de las principales arterias viales de Los Teques, genera una kilométrica cola y obliga a cientos de personas a caminar.
«Además de eso el corneteo es terrible. Nos pasó está mañana a las 8:00am, quisimos entrar a nuestra residencia – vivimos en e Savil- y no nos dejaban pasar. Es nuestra residencia», reseñó una de las afectadas.
Cada torre – C y D- que son las que dan acceso por la estación de servicio donde se encuentra el estacionamiento, tiene 74 apartamentos, «somos más de 150 familias afectadas por esta locura que implementó la alcaldía sin pensar consecuencias».
Redacción El Tequeño
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