Las enfermeras y médicos en Venezuela trabajan en condiciones deplorables. Además de lidiar con la falta de medicamentos en los hospitales y el acoso por parte de las autoridades, también deben cubrir los gastos de sus uniformes. La Prensa de Lara conversó que estos trabajadores y descubrió que necesitan hasta ocho quincenas para poder lucir prendas nuevas.
La Prensa de Lara | Lorena Rojas
Lucir un uniforme nuevo y tener uno de repuesto para las guardias se ha vuelto una tarea difícil para el personal de salud, el cual debe disponer de al menos 91 dólares u ocho quincenas completas para poder comprar zapatos, uniformes y medias compresivas. Tal situación los ha obligado a tener que remendar sus prendas y hasta usar algunas que no son las adecuadas para trabajar y exponerse a contaminarse.
Un trabajador de la salud sea médico o enfermera necesita entre dos y tres uniformes disponibles para una guardia, debido a que corren el riesgo de mancharse con alguno de los fluidos que puedan tener los pacientes, más si se encuentran en el área de emergencia. Asimismo, este debe ser cambiado al menos dos veces al año.
Estos 91 dólares con los que debe disponer el personal alcanzaría para una sola muda de ropa que incluiría las medias compresivas, las cuales rondan los $21 (en el caso de las enfermeras), un uniforme de pantalón y camisa que está en $30 y un par de zapatos que se puede conseguir desde $40; sin embargo, el presupuesto podría aumentar a $100, al tener que comprar gorros y tapabocas, pues sus precios van desde los 3 a 10 dólares.
«Las enfermeras estamos usando zapatos que no son adecuados para trabajar porque se le traspasan los líquidos, unos buenos zapatos rondan entre 40 y 60 dólares», dijo Belkis Medina, quien trabaja como enfermera.
Algunos trabajadores de la salud han optado por mandar a hacer sus uniformes; sin embargo, este no les es muy rentable, debido a que la mano de obra con las costureras les puede salir entre 10 y 20 dólares.
Según denuncia el Colegio de Médicos y los diferentes sindicatos de la salud, el Gobierno nacional estaría violando las cláusulas contractuales al atrasarse con los pagos de los uniformes y no realizar una dotación del mismo.
«El proceso de dotación no se cumple desde hace más de 23 años, donde los médicos y enfermeras tienen que costear con sus propios sueldos y salarios, que de paso son pírricos… deben autofinanciarse su dotación para poder ir a laborar en los centros públicos. Lo único que están aportando es una bata con fines propagandísticos porque vienen con mensajes de ideologías políticas», dijo René Rivas, presidente del Colegio de Médicos en Lara.
