Las autoridades ucranianas informaron este jueves de un nuevo bombardeo en la ciudad de Jersón (sur), con un balance de al menos dos muertos, que se suman a las tres víctimas mortales anteriormente reportadas en el conjunto de la región.
El ataque se produjo en el centro de la ciudad, a unos 100 metros de la sede de las autoridades regionales, informó el subjefe de la oficina presidencial ucraniana, Kyrylo Timoshenko, a través de su cuenta en Telegram.
Este bombardeo sigue a los que se registraron en otros puntos de la región, que causaron tres muertos, entre ellos un niño de ocho años.
Según el portal Ukrinform, los ataques masivos con artillería, tanques, lanzamisiles y drones se produjeron en las zonas recientemente liberadas de la región y dejaron además un total de 13 heridos.
En total, este miércoles se reportaron 86 bombardeos sobre asentamientos y zonas residenciales de toda la región, aún parcialmente controlada por las tropas rusas.
En esos ataques resultaron afectados, entre otros objetivos, una escuela, la editorial de un periódico y varios edificios de viviendas.
Ucrania ha denunciado asimismo la existencia de cámaras de tortura para menores en la región en las que se practicó presión psicológica y física hacia las víctimas.
Según informó el delegado de Derechos Humanos en el Parlamento ucraniano, Dimytro Lubinets, a través de su cuenta en Telegram, se han localizado diez de estas cámaras.
