“Hija, le agradezco que esté quieta, parada… si escuchan el micrófono, para que los traigan”. La voz de la abuela irrumpe el sonido de la selva toda la noche. Los helicópteros de las Fuerzas Especiales y el equipo de rescate no dan tregua y no descansan ni un segundo. La esperanza de encontrar a los niños con vida permanece intacta.
En la noche del jueves, las aeronaves sobrevolaron la selva sin descanso. Los mensajes de la abuela fueron reproducidos una y otra vez. Están dirigidos sobre todo a la niña mayor, de 13 años, que podría estar con sus hermanos en cualquier lugar de esa tupida vegetación. La abuela habla en español y en uitoto.
El general Giraldo, comandante de las Fuerzas Militares, dio la orden de insertar más tropa a la zona para reforzar la búsqueda. Este viernes, llegan desde Tolemaida más comandos de las fuerzas especiales a San José del Guaviare que serán insertados de inmediato a la zona.
“Ya no me va a decir mamá”, sostiene la mujer adolorida. Y se pregunta en qué condiciones llegará el cuerpo de su hija, tras haber pasado 17 días en la inclemencia de la selva.
Sobre sus cuatro nietos menores de edad, la mujer espera tener noticias pronto. “Es pura mentira. No han encontrado aún a los niños”, lamenta Fátima. Cuenta que la han llamado varios paisanos con diferentes versiones. “Quiero que me concreten”, sostiene.
En horas de la mañana del jueves, el presidente de la República, Gustavo Petro, explicó por qué borró el trino en el que anunciaba el hallazgo con vida de los niños. Señaló que las Fuerzas Militares siguen en esos operativos especiales en compañía de las comunidades indígenas.