Dada la infame e inocultable situación laboral a la que nos han sometido desde el poder, que ha implicado, entre otros múltiples factores, la reducción de nuestros sueldos en marzo pasado, luego de aplicar el instructivo ONAPRE, lo que significó el absurdo desconocimiento de la IV Convención Colectiva impuesta por ese mismo poder, a pesar de estar homologada ese año pasado, hecho que solo puede ser percibido como mofa a los universitarios, llevados nuevamente a un estado de mera sobrevivencia con sueldos de miseria, de depauperación continua, a lo que hay que sumar la permanente devaluación de la moneda.
En vista del prolongado, también sistemático, retroceso de la protección social que impide el acceso a prestaciones sociales dignas, a seguros, a protección de la salud, a un mínimo bienestar o resguardo económico o la indispensable recreación; tomando en cuenta la retención indebida y lesiva, por más de un año, del dinero que han aportado nuestros afiliados a la caja de ahorro, al Instituto de Previsión del Profesorado y a esta misma asociación, lo que nos ha forzado a una parálisis casi absoluta, al desconocimiento de compromisos y la afectación indeseada de los derechos laborales de nuestros trabajadores; hacemos un llamado a continuar defendiendo con protestas en la calle nuestros derechos, junto a otros factores educativos y laborales del país.
Hacemos también un llamado a la sociedad venezolana a apoyar firmemente estos reclamos, por la educación y el trabajo. No resulta justo, deseable ni posible continuar financiando con nuestra labor, con nuestra vida, la educación.
Para estos llamados tomamos también en cuenta las más recientes decisiones de nuestra Federación, así como el estado de crispación laboral provocado en toda la nación, debido a similares atropellos hacia casi todos los otros trabajadores venezolanos, por parte de quieenes detentan el poder.
Exigimos: atención inmediata al derecho laboral, intangible, progresivo, irrenunciable. Asi como cumplimiento de los acuerdos internacionales en materia de derechos humanos y laborales y a nuestra misma constitución. Trabajo decente, sueldos ajustados a la realidad económica del país, protección social. El pago inmediato de deudas causadas desde año pasado por la aplicación del Instructivo ONAPRE, así como el del dinero retenido indebida, injusta e ilegalmente a nuestra caja de ahorros, al IPP y a esta asociación.
Nos mantenemos en lucha continua por nuestros derechos y alertas a otras más contundentes decisiones derivadas del sistemático desconocimiento de los mismos.
La Junta Directiva.