El Kremlin negó hoy que haya advertido a Sudáfrica que la detención en su territorio del presidente ruso, Vladímir Putin, en virtud de la orden de arresto emitida por la Corte Penal Internacional (CPI) por presuntos crímenes de guerra en Ucrania, sería una declaración de guerra.
«Rusia ha dejado claro que arrestar a su presidente en ejercicio sería una declaración de guerra», dijo el presidente sudafricano, Cyril Ramaphosa, según una declaración hasta ahora confidencial y hecha pública este martes contra la voluntad del jefe de Estado.
«El portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, negó hoy ese extremo en su rueda de prensa telefónica diaria.
«No, eso no se ha dicho. No se le ha dado a entender nada a nadie», dijo Peskov al ser preguntado sobre la declaración de Ramaphosa.
Sin embargo, acto seguido añadió: «Todos en este mundo saben perfectamente qué significa intentar acciones contra el jefe de Estado ruso».
«Por eso, no hay que explicar nada a nadie», subrayó.
Sudáfrica informó hoy que Putin no asistirá la cumbre del grupo de economías emergentes BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) que se celebrará entre el 22 y el 24 de agosto en Johannesburgo.
«Por mutuo acuerdo, el presidente Vladímir Putin de la Federación de Rusia no asistirá a la cumbre, pero el país estará representado por el ministro de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov», señaló la Presidencia sudafricana en un comunicado.
Como Estado miembro de la CPI, Sudáfrica está obligada a cooperar en el arresto de Putin, pero el país había evitado revelar cómo procedería si el mandatario ruso Rusia aterrizaba en su territorio.