Acompañado por el presidente sevillista, José Castro, su director deportivo, Víctor Orta, y sus familiares, entre ellos su esposa, Pilar Rubio, y sus cuatro hijos, y antes de saltar al césped en un acto público, Ramos aseguró en una multitudinaria rueda de prensa que «hoy es un día inolvidable, emocionante», y que lo quiere «enmarcar», ya que «es un tema muy sentimental» poder volver a su «casa», «cerrar un ciclo» y reforzar «ese vínculo que desde niño» ha tenido «con la afición y el club» que le vieron «nacer».
EFE