Para el coordinador de Vente Venezuela en el municipio Guaicaipuro William Anseume, los centros de salud de la capital mirandina no están dotados para atención ni siquiera de la más mínima emergencia.
«Es evidente que oficialmente se quedan con lo impactante de las cifras del covid-19 que dicen controlar como nadie, aunque se sabe que no es verdad; con lo impactante de colocar gente en hoteles y albergues miserables sin suficiente ni adecuada atención, más bien abandonados a su suerte. Con lo impactante de la represión y de la estigmatización de los ciudadanos contagiados o con casos dudosos; con lo impactante del aislamiento de los vecinos de los contagiados. Pero la verdad es que hay centros de salud sin dotación mínima ni siquiera para una pequeña emergencia», aseguró.
Asegura que la mayoría de ambulatorios e incluso el propio HVS, según denuncia de su personal de salud, están sin posibilidades de sutura, sin medicamentos básicos y hasta sin agua la mayoría de las veces.
«Coloco dos ejemplos. El Pronto Socorro de Los Teques carece de posibilidades mínimas de atención hasta para una emergencia, a veces les llega agua corriente, al personal de salud acaso les dan un tapabocas como medida de protección. Allí no cuentan con ambulancia para algún traslado» detalló.
-En el ambulatorio de Paracotos ocurre igual. La gente a la deriva, con un personal dispuesto a atender pero sin medios materiales para hacerlo. Todo debe adquirirlo el paciente si acaso lo consigue y si tiene alguna posibilidad de comprarlo con estos bajísimos sueldos y las limitaciones que impone el confinamiento. Sin medios para traslados tampoco. Sin medicamentos básicos. Expuesta la población en su cuidado de la salud y las emergencias; expuesta la vida diariamente en medio del aislamiento. A orillas de la autopista, sin posibilidades de atender siquiera ningún accidente.
El dirigente de la tolda azul ahrego que es evidente que el covid-19 «pasó a un plano lejano con el problema enorme de la gasolina, y la falta de comida y de servicios: gas, agua, electricidad. Pero los recursos para la salud deben circular. Es materia de preocupación en la población y de atención obligatoria e inmediata no puede ser que se arriesgue sostenidamente de este modo la salud y la vida de los habitantes».
-¿Qué hacen los recursos? ¿Por qué tan continuas desatenciones? ¿Por qué no se ocupan ni alcaldía ni gobernación de materia tan delicada de la que tienen que ocuparse? Es muy serio este problema. Pero falta seriedad en los funcionarios públicos en su labor. Puro bombo y platillo publicitario, pero en la realidad palpable no hay respuesta. En Guaicaipuro seguimos a la deriva más plena en materia de salud.
Redacción El Tequeño
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