Industriales consideran que la única manera de aumentar su producción y ser competitivos con naciones como Colombia es que el Gobierno nacional y los gobiernos locales disminuyan el precio de los impuestos y activen las Zonas Económicas Especiales (ZEE) que en el caso del estado Lara hay dos, una que integra las cuatro zonas industriales en Iribarren, y la otra en el municipio Palavecino con el puerto seco.
“Lara es el único estado de Venezuela con dos ZEE y eso es algo que hay que aprovechar, pero es necesario que el Gobierno otorgue incentivos fiscales. Nosotros antes de finalizar 2022 solicitamos una reunión con el superintendente de las ZEE, pero el alto Gobierno no nos ha dado respuestas. Igualmente, hemos tenido reuniones con el alcalde de Iribarren, Luis Jonás Reyes, porque seguimos considerando que el monto del aseo urbano es muy elevado, prácticamente se paga una tarifa igual al arancel de Actividad Económica que se debe pagar mensualmente”, expresó Marco Teixeira, presidente de la Cámara de Pequeños y Medianos Industriales de Lara (Capmil).
Sostiene que las industrias deben pagar el impuesto de Ley Orgánica de Ciencia y Tecnología (Locti) y que ya se están registrando fiscalizaciones. “Ese es un impuesto que nos va a obligar a hacer ajustes en nuestros gastos de producción. Lo que hemos conversado con el alcalde, Luis Jonás, es que para incentivar la producción no es posible que sólo se nos permita una ganancia de 30%, cuando los impuestos parafiscales siguen aumentando y hace que la utilidad de cada empresa se vuelva sal y agua”, expresó.
Joel Segura, presidente de la Cámara de Industriales de Lara, dijo que los diálogos con el Ejecutivo nacional han dado leves resultados como, por ejemplo, el 03 de enero salió publicado en Gaceta Oficial que el Gobierno ya no está exonerando totalmente los impuestos de importación ni de IVA a los productos terminados, ahora los importadores deben pagar 10% de cada uno.
“Consideramos que el sector privado poco a poco va ganando espacios”, alegó.
